En un trabajo en equipo, cinco guardavidas municipales lograron extraer dos trasmallos alojados en la playa denominada “Bajada de Picoto”, del balneario El Cóndor.
Este trabajo se realizó en procura de prevenir posibles accidentes con bañistas que disfrutan del lugar, y también para preservar la fauna marina de la zona.
En este sentido, el Subsecretario de Seguridad e Higiene, José Flores aclaró que estas tareas se realizaron gracias a diferentes avisos de vecinos que advirtieron de la situación.
Julio Flores, al respecto mencionó que “este tipo de medidas evitan que, tanto personas como animales, sufran las consecuencias de acciones irresponsables tomadas por el hombre”.
“El espacio costero es un espacio público que debe ser tratado como tal, entonces no podemos permitir el avance de particulares o privados cuando ponen en riesgo a sus vecinos”, explicó Flores y agregó que “ahí es cuando debemos actuar para dar orden e imponer criterios en los que prevalezca la seguridad de las personas y el interés común”.
El trasmallo es un instrumento que utilizan los pescadores. Las piezas exteriores son de unos 60 m, la central de unos 100 m y la altura de unos 2 m, aunque pueden montarse trasmallos de mayor altura, hasta unos 8 m.